miércoles, 6 de octubre de 2010

CUANTO MAS GRANDE ES LA MISERIA DE UN ALMA....MAS GRANDE ES MI MISERICORDIA

Juan Pablo II, por pedido de Jesús a Santa Faustina, estableció la Fiesta de la Divina Misericordia para el Domingo siguiente a Pascua, es decir este Domingo 11 de Abril.


Jesús promete que todo quien se confiese y comulgue ese día, su alma queda limpia, como recién bautizada, sin deudas pendientes por los pecados que se deben reparar con sufrimientos atroces en el Purgatorio (Santa Faustina lo describe como un “ardor horrible”).


¡Aprovechemos! No sea que nos arrepintamos cuando sea demasiado tarde para pedir Misericordia porque ya hemos muerto y sólo queda aplicar la Justicia.


También aprovechemos para pedirle a los Sacerdotes que el Sábado a la noche (vísperas) y el Domingo, traten de estar en el confesionario todo lo posible y que anuncien esos horarios extraordinarios para que la gente sepa que es un día de gracia especial. Reenvía este mensaje de Jesús a todo Sacerdote que conozcas (Diario de Santa Faustina, que se puede bajar de www.divina-misericordia.org ):


“Deseo que la Fiesta de la Misericordia sea refugio y amparo para todas las almas y especialmente, para los pobres pecadores(..)” “El alma que se confiese y reciba la Santa Comunión obtendrá el perdón total de sus culpas y de las penas. En este día están abiertas todas las compuertas Divinas a través de las cuales fluyen las gracias. Que ningún alma tema acercarse a Mí, aunque sus pecados fueran como escarlatas (..) Aunque un alma fuera como un cadáver descomponiéndose de tal manera que desde el punto de vista humano no existiera esperanza alguna de recuperarse y todo estuviese ya perdido, no es así para Dios. El milagro de la Divina Misericordia restaura a esa alma en toda su plenitud” (699, 1448)


“Deseo que los sacerdotes proclamen esta gran Misericordia que tengo para las almas pecadoras. Que el pecador no tenga miedo de acercarse a Mí”. “y cuanto más grande es el pecador, tanto más grande es el derecho que tiene a Mi misericordia" (723).


“Diles a mis sacerdotes que los pecadores más empedernidos se ablandarán bajo sus palabras cuando ellos hablen de Mi Misericordia insondable, de la compasión que tengo por ellos en Mi corazón. A los sacerdotes que proclamen y alaben Mi Misericordia, les daré una fuerza prodigiosa y ungiré sus palabras y sacudiré los corazones a los cuales hablen” (1521).


Cuanto más grande es la miseria de un alma tanto más grande es el derecho que tiene a Mi misericordia (1182). Soy más generoso para los pecadores: por ellos he derramado Mi sangre; que no tengan miedo de acercarse a Mí, son los que más necesitan Mi misericordia (1275).


Aún si un alma fuera como un cadáver en descomposición y humanamente sin ninguna posibilidad de restauración y todo estuviera perdido, no es así para Dios: el milagro de la Divina Misericordia restaura a esa alma en toda su plenitud. ¡Infelices los que no aprovechan de este milagro de la Misericordia Divina!: lo pedirán en vano, cuando sea demasiado tarde (1448). Quien no quiere pasar por la puerta de Mi misericordia, tiene que pasar por la puerta de Mi Justicia (1146).


Cuando te acercas a esta Fuente de Mi Misericordia, siempre fluye sobre tu alma la Sangre y el Agua que brotó de Mi Corazón y ennoblece tu alma. Cada vez que vas a confesarte, sumérgete en Mi misericordia con gran confianza para que pueda derramar sobre tu alma la generosidad de Mi gracia. Cuando te acercas a la confesión debes saber que Yo Mismo te espero en el confesionario, sólo que estoy oculto en el sacerdote, pero Yo Mismo actúo en tu alma... de esta Fuente de la Misericordia las almas sacan gracias exclusivamente con el recipiente de la confianza. Si su confianza es grande, Mi generosidad no conocerá límites. Los soberbios permanecen siempre en pobreza y miseria, porque Mi gracia se aleja de ellos dirigiéndose hacia los humildes (1602). Lee 1485,1275,1521.


Comentario: cada pecado hiere el alma. Es clavar un puñal a tu propio corazón, y también al de Jesús y María. Puedes curar las heridas con la confesión y la comunión. ¡Cuanto más frecuentes mejor! (por ejemplo comunión diaria y confesión semanal).

SONRIE....DIOS TE AMA

No hay comentarios:

Publicar un comentario